Tras nuestra visita a expotarta hemos quedado inundadas de rosa, rosa por aquí y por allá, vamos, como si el único color relacionado a la repostería creativa fuera ese. Así que lo primero que pensamos para nuestra tarta de esta semana fué hacerla NO ROSA, ja ja, que maravilla que cuando nos ponemos a hacer la fondant, enamoradas de las pastas de azúcar saborizadas, el único sabor y por tanto color que nos quedaba era el de fresa... así que ¡¡¡tarta rosa!!! Pues aquí está nuestra experiencia, hicimos la fondant a la antigua, batiendo y batiendo el azúcar diluido en agua y puesto a hervir hasta punto de bola, y dale que te pego con una cuchara de madera (en otro post pondremos la receta). El sabor ha sido bueno, pero mejorable, sabe a fresa, sí, pero le falta algo... la próxima vez probaremos con unas gotitas de limón, y os contaremos el resultado.
Un diseño clásico que aqui os dejamos, y de sabor estupendo. ¡Todo de fresa!
Basta con que le pongas una gotita de violeta, para que tu vida sea color de rosa (Anónimo).
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